La leyenda del autobús fantasma es una de las historias urbanas más conocidas en México, originada en la década de 1980 tras un trágico accidente en la carretera entre Toluca e Ixtapan de la Sal.
Se dice que un autobús número 40, lleno de pasajeros, se precipitó por un acantilado debido a fallas mecánicas, causando el deceso de todos a bordo.
Desde el accidente, se afirma que el autobús sigue circulando por la misma ruta, transportando las almas de los difuntos.
