El gobierno del presidente estadunidense Joe Biden aprobó el enorme proyecto de perforación petrolera Willow en North Slope, una región de Alaska rica en petróleo, lo que ha enfurecido a defensores del clima.
La zona donde está previsto el proyecto alberga hasta 600 millones de barriles de petróleo, aunque ese petróleo tardaría años en llegar al mercado, ya que el proyecto aún no se está construyendo.
La aprobación es una victoria para la delegación bipartidista de Alaska en el Congreso y para una coalición de tribus y grupos nativos de Alaska que elogiaron el proyecto de perforación como una nueva fuente de ingresos y empleo muy necesaria para la remota región.
Sin embargo y según ambientalistas, rompe la promesa de campaña de Biden de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero que calientan el planeta y promover la energía limpia.