A pesar de que la Constitución venezolana dicta que el presidente Nicolás Maduro debería rendir cuentas ante la Asamblea Nacional (Parlamento), mismo que es el único poder del Estado que está en manos de la oposición, el mandatario lo hará en los próximos 10 días ante la Asamblea Nacional Constituyente.

Ya el año pasado, Maduro evitó una audiencia ante el Parlamento y n ese momento se presentó ante el mismo Tribunal Supremo de Justicia que le quitó todas las facultades del Legislativo luego de que triunfara la mayoría opositora en las elecciones parlamentarias de diciembre de 2015.

Y es que la Constituyente ha convocado este mismo viernes al presidente Maduro para que “rinda su memoria y cuenta”.

El artículo 237 de la Constitución venezolana establece que el Presidente deberá rendir cuentas cada año (“dentro de los diez primeros días siguientes a la instalación de la Asamblea Nacional”) ante el Parlamento.

Sin embargo el Parlamento venezolano ha sido reducido por el Supremo a un foro netamente.

Tanto el Parlamento como la Constituyente se instalaron al celebrar, en las dos salas distintas del Palacio Federal Legislativo en que se reúnen, la primera sesión de 2018.