A través de una carta escrita desde Bélgica el exmandatario de la Generalitat, Carles Puigdemont, asegura que va a establecer una “estructura estable”, la cual se va a desarrollar desde Bruselas, manifestando que este gobierno es “legítimo”, y cuyo objetivo radica en el triunfo del secesionismo durante las próxima elecciones a celebrarse en diciembre, así como en la liberación de los que “presos políticos”.

En dicha carta, dada a conocer este día, el expresidente catalán admite que comprende “la desorientación causada por nuestra falta de respuestas rápidas ante los ataques desmesurados contra los representantes y las instituciones legítim as catalanas”.

Igualmente, aseguró que “la apuesta del pueblo catalán por el derecho a la autodeterminación, por el diálogo y por una solución acordada”.

También se dio tiempo de denunciar “la decadencia democrática del Estado español, así como de los abusos de una Unión Europea que ha tolerado, e incluso amparado de forma vergonzosa, las actuaciones represivas españolas”.

El Ejecutivo central, presidido por Mariano Rajoy, cesó al gobierno de Cataluña, disolvió su Parlamento y convocó elecciones regionales para el 21 de diciembre.

“Por eso tomamos las elecciones que nos plantea el Estado español el día 21 como un reto para recuperar la plena democracia sin presos, sin venganzas, sin imposiciones, sin furia y llena de futuro, de diálogo y de acuerdo…”, dice en la carta.