A pesar de que la decisión final fue no abandonar el acuerdo nuclear firmado por Irán, Francia, Reino Unido, Alemania, China, Rusia y Estados Unidos en 2015, el presidente de éste último, Donald Trump emitió un mensaje en el cual deja en claro cuáles serán la nueva estrategia a seguir.
Pese a su permanencia, por el momento, dentro de este acuerdo, el mandatario norteamericano dejo ver que éste presenta algunos “defectos graves”, mismos sobre los que le ha pedido tanto al Congreso, como a sus aliados internacionales trabajar a su lado para poderlos a corregir. Y advirtió que, de no presentar variaciones, Estados Unidos se saldrá de este pacto.
“En caso de que no podamos llegar a una solución, el acuerdo será cancelado”, aseguró el mandatario.
“No seguiremos por un camino cuya conclusión predecible es más violencia, más terror y la amenaza muy real de un brote nuclear en Irán”, subrayó.
Entre la nueva estrategia promovida por Trump, está la cancelación de la certificación que él debe realizar periódicamente ante el Congreso. “La suspensión de sanciones es apropiada y proporcionada respecto a las medidas que Irán” está tomando para limitar su programa nuclear.
“Trabajaremos con el Congreso y nuestros aliados para afrontar los muchos defectos graves del acuerdo”, señaló Trump en su discurso desde la Casa Blanca.
Lo que el presidente Trumo busca cambiar entre otra cosas son: las “débiles inspecciones” señaladas en el acuerdo; hacer frente al “programa de misiles balísticos” de Teherán y eliminar las “fechas de caducidad” de las restricciones impuestas sobre el programa nuclear iraní, que en algunos casos expiran después de entre 10 y 25 años.
“¿Cuál es el propósito de un acuerdo que sólo retrasa la capacidad nuclear (de Irán) durante un periodo corto de tiempo? Esto, como presidente de Estados Unidos, es inaceptable”, afirmó.
Trump no dejó pasar la oportunidad para atacar nuevamente este acuerdo, al cual se refirió como “una de las peores y más unilaterales transacciones en las que jamás ha entrado Estados Unidos”, además de acusar a Irán de “no estar cumpliendo el espíritu del acuerdo”.
A pesar de que Irán, reconocido por los Estados Unidos, ha cumplido con lo acordado en este pacto, piensa que retirar las sanciones al que Washington accedió, no ha sido “proporcional” a las medidas que ha tomado Teherán, y que los “débiles mecanismos de inspección” podrían permitir a los iraníes ocultar un incumplimiento.
“Se suponía que el acuerdo iba a contribuir a la paz y seguridad regional e internacional, pero el régimen iraní sigue alimentando” la inestabilidad en la región, añadió Trump.
El gobierno norteamericano le pedirá al Congreso que enmiende la ley conocida como INARA con lo que se buscan marcar una “líneas rojas” que, si Teherán las cruza, supondrían la imposición automática de sanciones.
Trump aseguró, además, que su Gobierno hará más para “afrontar las acciones hostiles” del “régimen fanático” iraní, que es “el principal patrocinador del terrorismo” en el mundo y “ha esparcido la muerte, la destrucción y el caos” por todo el planeta.
Así mismo, Estados Unidos sancionó hoy al Cuerpo de los Guardianes de la Revolución iraní (IRGC, en inglés) por su apoyo al terrorismo, un paso que promete disparar las tensiones con Teherán, que ha advertido que tratará a Estados Unidos como “un país terrorista” si actúa contra ese cuerpo de elite.
“Autorizo al Departamento del Tesoro a sancionar a todo el IRGC por su apoyo al terrorismo, y a aplicar sanciones a sus funcionarios y filiales”, dijo Trump durante su discurso en la Casa Blanca.
Trump tildó al Cuerpo de los Guardianes de “fuerza personal terrorista y corrupta” de los líderes iraníes que tiene un gran peso en la economía iraní y “financia” actividades terroristas en el extranjero.