
Luisa Ortega, quien fuera Fiscal General de Venezuela antes de mostrar su inconformidad con las formas de proceder del gobierno de Nicolás Maduro y quien llegara el pasado viernes a Bogotá, Colombia junto con su esposo, el diputado chavista Germán Ferrer, viajarán a los Estados Unidos, según reportan medios locales.
Específicamente fue el medio ‘Blu Radio’, quien dio a conocer que la exfiscal Ortega se reunió durante el fin de semana con diplomáticos norteamericanos y terminó aceptando viajar a ese país, en donde pediría asilo político.
A penas el día de ayer, Juan Manuel Santos, presidente colombiano, señalaba en sus redes sociales que Ortega “se encuentra bajo protección del Gobierno colombiano”, asegurando que “si pide asilo se lo otorgaremos”.
Estos ‘twits’ no cayeron nada bien en su vecino país Venezuela, y el primero en arremeter contra el país cafetero fue el nuevo fiscal general de Venezuela, Tarek Saab, al manifestar que el apoyo “incondicional” de Santos a Ortega demuestra que Colombia es el “epicentro de la conspiración” internacional contra su país.
“Bogotá se ha convertido en centro de la conspiración contra la democracia y la paz en Venezuela. Vergüenza histórica del ‘Caín de América’”, afirmó.
Mientras que Jorge Arreaza, ministro de Exteriores venezolano,que calificó de “cínica” la decisión de Colombia.