
El atentado realizado hacia un convoy donde se movilizaban civiles y militares evacuados de dos comunidades sirias podría tratarse de un crimen de guerra, informó la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
“Este atentado contra civiles inocentes podría constituir un crimen de guerra”, informó drante una rueda de prensa el portavoz de esa agencia de la ONU, Rupert Colville, quien recalcó que por el momento no tienen conocimiento de quién habría sido el responsable de tal ataque.
Sin embargo, mencionó que algunas imágenes a las que ha tenido acceso revelan a un hombre entregando dulces a un grupo de niños previo a este atentado.
“Por ahora no puedo confirmar si esa persona fue la que provocó el atentado o no, o si fue lo que causó tan alto número de víctimas menores de edad”, puntualizó.
Colville agregó que de acuerdo a la cercanía que existe entre este ataque y el supuesto atentado en el que se involucró armamento químico “está claro que las partes en conflicto no respetan las mínimas reglas de la guerra que establecen proteger a los civiles”.
Cifras del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos informan que en este ataque con armas químicas hubo 96 civiles muertos (13 mujeres, 16 hombres y 67 niños), así como 120 heridos.
Rupert Colville finalizó pidiendo “mejor protección” en la realización de las próximas campañas de evacuación, recordando que este grupo fue atacado de manera específica.