
El alcalde de Cuernavaca, Cuauhtémoc Blanco Bravo, negó “categóricamente” cualquier tipo imputación en su contra por el asesinato del empresario Juan Manuel García Bejarano, esto tras haber sido acusado de haber ordenado este crimen por José “N”, quien está acusado de realizar el homicidio.
En un comunicado, el presidente municipal de Cuernavaca lamentó “los profundos niveles de cinismo y cobardía por parte del grupo político que durante los últimos ocho meses me ha querido destituir de mi cargo a través de un proceso de revocación de mandato, de suspensión definitiva y de juicio político”.
Blanco Bravo añadió que “las múltiples denuncias ante la Procuraduría General de Justicia de Morelos hayan llegado al gradeo de influir en las declaraciones de un presunto asesino para así buscar, otra vez y a como dé lugar, que sea removido del cargo de Presidente Municipal de Cuernavaca”.
Señaló que el pasado 11 de abril y a manera de previsión, solicitó “personalmente al procurador General de la República, Raúl Cervantes Andrade, ejerciera su facultad de atracción para que sea la Procuraduría General de la República quien realice las investigaciones para esclarecer los hechos y determinar responsabilidades respecto al trágico y lamentable homicidio de Juan Manuel García, y de esta forma asegurar que el Gobierno del Estado de Morelos, se mantenga alejado de influir políticamente en lo que en derecho corresponda”.
Según informan fuentes de la Fiscalía General del Estado de Morelos, no solamente el ex futbolista fue señalado por el acusado de haber ordenado el asesinato, sino que también habría mencionado a otra persona a la cual identificaba como un “güero español”.
José “N” mencionó también en su testimonio, el cual por ley fue grabado, que recibió la cantidad de 200 mil pesos de parte de ellos como pago por matar al empresario.